El embarazo es una época muy bonita y única en la vida de una madre, así que se recomienda capturar los momentos más especiales del embarazo para recordarlos pasados los años. Muchas embarazadas apuestan por una sesión de fotos profesional para conseguir imágenes originales. Toda sesión fotográfica empieza con una buena planificación para garantizar el mejor resultado y hay que tener en cuenta las limitaciones físicas o el estado de ánimo de la futura mamá.
La gestante debe elegir ropa y accesorios que le permitan moverse y sentirse a gusto en todo momento. Lo ideal es llevar telas vaporosas y vestidos largos. En estas fotos se llevan los atuendos minimalistas y prendas básicas, como vestidos negros o bodies en tonos neutros y suaves, para resaltar la belleza de manera elegante. Se debe evitar estampados o elementos que quiten protagonismo al embarazo.
Aunque muchas mamás optan por desnudos artísticos, pero es aconsejable que se sientan cómodas y que la sesión se realice en el lugar adecuado. Se trata de tomar fotos del cuerpo desnudo de la futura mamá con poses artísticas que resalten la figura y el embarazo. Los desnudos artísticos en el estudio permiten jugar con la luz, las sombras y las formas para generar imágenes naturales. Es fundamental hacer descansos y evitar sesiones largas que puedan incomodar a la mamá.
Otra tendencia que destaca en las sesiones de embarazo es el uso de telas y texturas en la fotografía. Muchos fotógrafos optan por las telas para lograr efectos visuales sorprendentes y crear imágenes dinámicas. Estas telas pueden ser de diferentes colores y materiales, como seda, encaje o algodón. Otra opción son las telas transparentes para envolver suavemente el cuerpo de la embarazada, creando un efecto más delicado.
El papá o los hermanos mayores también pueden participar en la sesión de fotos, ya que es importante capturar el ambiente familiar. Los acompañantes pueden llevar prendas en colores neutros y a juego con el look de la futura mamá. Para mostrar todo el progreso del embarazo, lo ideal es hacer una foto al mes, o al trimestre y usar el mismo fondo. El momento adecuado para realizar el reportaje depende del crecimiento de la barriga, pero en general el período entre la semana 29 y la 36 suele ser el más adecuado. Las fotografías de embarazadas suelen ser dulces, por lo que no es aconsejable que la futura mamá se maquille demasiado.
Los fotógrafos de la empresa Misma Órbita, especializados en fotografías de embarazos y lactancia, nos explican que es importante llevar a la sesión todos los objetos del bebé para crear imágenes originales y así la futura mamá puede poner sobre su barriga los zapatitos, el chupete, la ecografía o incluso puede pintar en su tripita el nombre del pequeño.
Si el embarazo transcurre durante una temporada de agradable temperatura, la futura mamá puede realizar la sesión en exteriores, pero debe escoger lugares que sean bellos y naturales. Muchas embarazadas apuestan por las siguientes ideas para conseguir fotos divertidas y sacar el máximo partido a su belleza:
-Baños de leche: los baños de leche son una nueva tendencia en fotografía, pero no es necesario que sea leche, ya que se le puede añadir colorante al agua. En esta fotografía la gestante puede llevar un bikini y el pelo recogido con horquillas de diferentes colores.
-Con vestidos de encaje: algunas mujeres se sienten realmente bien durante el embarazo y deciden insinuar la forma de la barriga con un vestido de encaje en negro o un bañador escotado. Estas fotos pueden realizarse en estudio, pero también quedan muy bonitas en exterior.
–Foto de la familia: la revista Sapos y Princesas aconseja tomar una foto de la familia y colocar a los hermanos del bebé por orden y con globos según la edad.
–La barriguita desde arriba: las fotografías desde arriba son idóneas para apreciar el aumento de la barriguita mes a mes.
–Fotografía de embarazo en la rutina diaria: Cada vez a más embarazadas les gusta hacerse un reportaje de fotos de embarazo donde aparecen haciendo su rutina diaria, por ejemplo preparando el desayuno o sentadas en el sofá.
–Fotografía de la silueta o a contraluz: otra opción es dibujar la silueta del vientre en una fotografía y la embarazada puede mirar la preciosa curva de su vientre.
La embarazada debe elegir un fotógrafo con experiencia y tener en cuenta el estilo de fotografías que realiza. Es importante que la futura mamá se sienta cómoda para conseguir imágenes naturales y no se note tensión en su rostro. Lo ideal es optar por un fotógrafo que transmita confianza y se encargue de todos los detalles.